El año pasado, después de cuatro años sin enseñar en un aula, la vida y Dios me dieron la oportunidad de reencontrarme con ese pedazo de mi corazón en donde está guardado todo lo que quiero comunicar. El momento fue perfecto y casi sin proponérmelo, me pusieron delante de las caras curiosas de mis nuevos alumnos. Siempre que empiezo con un grupo nuevo me siento tan nerviosa como aquella vez hace muchos años en que di mi primera clase. Pero mis nuevos alumnos resultaron ser un grupo muy especial, muy receptivo y con mucha capacidad de adaptación al cambio. Fui recibida con atención y sentí que era muy fácil enseñarles. Realmente fue un tiempo que disfruté enteramente. Mis alumnos del año pasado, hicieron que me sintiera bienvenida y querida. Desde el fondo de mi corazón se los agradezco.
Como la vida está hecha de despedidas, este año no estaremos juntos, yo he tomado otro reto y nuevas caritas se presentarán delante de mí el primer día de clase. Y como siempre estaré nerviosa como en mi primera clase. Sin embargo, estoy segura que haré mi mejor esfuerzo por ejercer ese efecto multiplicador que es el oficio de enseñar. También estoy segura que mis nuevos alumnos aceptarán el reto de adaptarse a mi modo de enseñanza y mis exigencias. Pero de una cosa si tienen que estar seguros todos los que han compartido el tiempo conmigo como mis alumnos en un aula, a mí me importa mucho su bienestar y deseo que no solamente sean académicos sino personas integras que han recibido de sus profesores, entre ellos yo, lo mejor que ellos han podido ofrecerles, el ejemplo de esfuerzo, amor al trabajo y responsabilidad frente a nuestros alumnos.
El ser la directora de Asesoria Educativa, deja abierta otra posibilidad de encontrarme con mis alumnos y ahora hasta con los hijos de mis alumnos a quienes también apoyamos. He tratado de transmitir a mis colaboradores el amor a la enseñanza y me siento muy complacida porque ellos han entendido que nosotros no solo impartimos conocimientos, sino que es muy importante en la línea educativa de la asociación, preocuparnos por los demás aspectos de la formación integral de los alumnos que solicitan nuestro servicio. A mis queridos alumnos del 2012, les pido que se mantengan en contacto conmigo a través de las redes sociales (Facebook, Twitter, Linkedin) o el correo electrónico y que si necesitan apoyo, Asesoria Educativa estará lista para incorporarlos en nuestro grupo de este año. Y continúen preparándose para obtener las mejores notas en IB.
1 comentario:
De parte del salón Jean Piaget, quería desearte los mayores de los éxitos en lo que ha de venir en tu nuevo camino. Te extrañaremos mucho y siempre te tendremos en nuestra memoria personal y colectiva. ¡Muchas gracias por habernos enseñado y que Dios te acompañe siempre!
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